domingo, junio 18, 2006

CANCER O EL CANGREJO

http://www.youtube.com/watch?v=NdEzGujcT-8


Banda sonora de Cleopatra (1963).


Y continuamos con Petronio, “El Satiricón” y las costumbres gastronómicas romanas.

Los romanos ricos comían en el triclinium. Esta era una habitación en la que había una mesa uno de cuyos lados estaba libre para el servicio de comida. En los otros tres lados se ponían lechos y en cada uno de los lechos se disponían tres personas. Estas se recostaban sobre el brazo izquierdo, o sea mirando hacia su derecha.

Observando la habitación desde la perspectiva del lecho del medio y en la dirección de la mesa, el lecho de la izquierda se llamaba el superior, el del medio el central y el de la derecha el inferior. En cada lecho, cada uno de los lugares se llamaban -también de izquierda a derecha- el superior, el central y el inferior. El sitio de honor era el inferior en el medio -el de la derecha del lecho central- y el dueño de casa se colocaba en el lugar superior del lecho inferior, vecino del lecho de honor hacia la derecha

En una cena romana clásica, las mujeres comían sentadas en sillas como lo hacemos hoy. También comían sentados los niños y las personas que guardaban luto.

Era todo un arte el de comer acostado reclinado sobre el brazo izquierdo. Con este brazo se sostenía el plato y los alimentos se tomaban con la derecha. Para la sopa se utilizaba una cuchara –ligula-, para el puré o el paté una cucharita –cochlear- y para alimentos sólidos se utilizaban los dedos. El tenedor solo se comenzó a usar sistemáticamente en el siglo IX. La carne les llegaba a los comensales ya trinchada por un esclavo –carptor- en trozos que se podían llevar fácilmente a la boca. Quizá esta centralización de los cuchillos se debiera a razones de seguridad. Entre plato y plato los esclavos acercan agua para lavarse los dedos. También tienen los comensales a mano una servilleta para secarse las manos, el sudor y para sonarse las narices. Una curiosa costumbre era la siguiente: los comensales portaban su propia servilleta que usaban para envolver algunas sobras que llevaban de vuelta a su casa.

La imagen que encabeza el post está tomada de la casa de Neptuno y Anfitrite en Herculano, para verlo mejor pinchar en:

http://herculano.desdeinter.net/DSCN3046Casa%20di%20Nettuno%20e%20Anfitrite-1.htm

La siguiente descripción que se hace en el Satiricón es la de:


Cáncer: “De una olla nacarada y adornada con perlas, brotaban volutas de una sopa de cangrejos”.

Yo os sugiero la siguiente receta y, os aseguro, que es buenísima:




CREMA DE NÉCORAS. (Foto casera. Pinchar para ampliar).

Ingredientes: 4-5 nécoras según tamaño, 100 grs. gambas o langostinos limpios, 100 grs. mejillones limpios, 200 grs. nata líquida, 2 pastillas avecrem pescado, 1 pimiento rojo muy picado, 1 pimiento verde muy picado, 1 cebolla muy picada, guindilla (opcional), 200 grs. tomate frito, 5 cucharadas soperas de aceite.

En un poco de agua fría con un poco de sal poner las nécoras (que queden cubiertas por el agua) y cocer durante 5 minutos, además de las cáscaras (con sus cabezas) de las gambas o langostinos; reservar ese agua. Una vez cocidas, separar la carne de las nécoras de la cáscara y pasar por separado ambas cosas (carne por un lado y cáscaras de nécoras y gambas, por otro) por la batidora (ayudándonos con un poco de líquido); poner en una cazuela 600 c.c. de agua contando con la de la cocción de las nécoras, añadir las cáscaras trituradas, el agua que han soltado, es decir, todo y dejar cocer 10 minutos. Colar por el colador y reservar.

En una cazuela, poner el aceite y rehogar la cebolla y los pimientos durante unos 7 minutos; pasar por la batidora todo ello y devolverlo a la cazuela. Añadir entonces el fumet que hicimos anteriormente, la carne de las nécoras, las gambas, los mejillones, ¼ de tomate y las dos pastillas de avecrem (si no se quiere hacer con pastillas, entonces los 600 c.c. en vez de agua tiene que ser de caldo de pescado).

Cocer durante 20 minutos y volver a pasarlo todo por la batidora; entonces, aún en la batidora, incorporar la nata y batir durante unos segundos. Se puede adornar con gambas picadas o lo que se desee y se puede tomar tanto fría como caliente.