sábado, junio 19, 2010

EL GRUPO DE LA OSA



https://www.youtube.com/watch?v=28Qi4jLtigc



Debussy; "Arabesque I"



Constelación Carina. Hemisferio Sur.

Una Constelación (o Familia) es una agrupación arbitraria, convencional de estrellas unidas por líneas imaginarias; tenemos un total de 88 que se puedan ver en la bóveda celeste, pero tales agrupaciones han variado a lo largo de la historia de la humanidad, dependiendo de la cultura.

Este enlace está muy bien:


http://es.wikipedia.org/wiki/Constelaci%C3%B3n

Continuando con las Osas, dentro de este grupo encontramos, además de las dos ya tratadas, la Constelación del Dragón, Constelación de los perros de caza, Boyero, Cabellera de Berenice, Corona Boreal, Camelopardis (la jirafa), el Lince y el León Menor.




DRAGON (Draco).

Es una de las pocas constelaciones que se parecen a los objetos de los cuales reciben el nombre. La cola empieza al Norte de la lanza de la Osa Mayor; el cuerpo se tuerce hacia el norte envolviendo a la Osa Menor en un repliegue, y luego se desvía abruptamente hacia el Sur hasta formar una notable cabeza romboidal cerca de Hércules. Mizar, la Polar y la cabeza del Dragón forman un triángulo aproximadamente equilátero.

Los antiguos griegos identificaban a Draco con Ladón, un monstruo de cien cabezas a quién Hera puso como guardián y al que Hércules mató durante su undécimo trabajo para poder conseguir las manzanas doradas del jardín de las Hespérides, las siete ninfas que vivían en el monte Atlas, en el Occidente lejano. Hera sintió tanto la muerte del fiel guardián que le puso en el firmamento alrededor del Polo Norte.





BOYERO (Bootes).

Al Sur y al Este de la Osa Mayor. Esta constelación es de las más antiguas, se menciona ya en la Odisea. Destacan en ella: Arcturus, una hermosa estrella, color oro viejo y con un diámetro 30 veces mayor que el del Sol, e Izar, una estrella doble y una de las más bellas del firmamento.

Sobre esta constelación, desde la mitología, se han tejido multitud de historias; desde representar a un agricultor con sus dos perros (Asterión y Chara -constelación de Canes Venatici-) vigilando a las osas para que no escapen de su reducto, hasta identificarle con Filomeleo, el primer agricultor hijo de Demeter y Yasonte (Lasionte). Su madre Demeter, diosa de la agricultura, le enseñó a cultivar el campo, y fue el inventor del arado, el carro y la yunta de bueyes.

Contrastando con esta representación, otro relato mítico lo identifica con Icario a quien Dionisos enseñó los secretos de la uva en premio a su hospitalidad. Cuando Icario dio vino a los pastores de su localidad, estos confundieron la intoxicación etílica con envenenamiento, por lo que le asesinaron. Su hija, Erígone, fue conducida por sus perros, representados por la constelación de Canis Venatici, o por Propoción en Canis Minor, hasta el pie de un árbol en el que yacía el cuerpo de su padre y abrumada por la pena, se ahorcó. En recuerdo a esta tragedia, a Icario se le concedió un lugar entre las estrellas como Bootes, y a su hija se la convirtió en la constelación de Virgo.

Respecto a su estrella más brillante, Arcturus, señalar que también representa a Arcade, hijo de Calixto y Zeus; por lo visto, su abuelo Licaón invitó a Zeus a un banquete y le sirvió a su propio nieto Arcade. Zeus recompuso el cuerpo de este y lo convirtió en estrella: Arcturus. Licaón fue convertido en lobo como castigo, y posteriormente paso a ser la constelación de Lupus, aunque para los romanos, según distintas versiones, era una representación de la legendaria loba que amamantó a Rómulo y Remo, fundadores de la ciudad de Roma.

De todas formas, siempre está en relación con la siguiente constelación:





LOS PERROS DE CAZA (Canes Venatici).

Está constituida por dos brillantes estrellas al Sur pero aún en el interior de la curva de la lanza del Carro; destaca Cor Caroli, alfa de la constelación. Representan a Asterión (al Norte) y Chara (al Sur), los perros que acompañan a Boyero.





CABELLERA DE BERENICE (Coma Berenice).

Se encuentra al Sur de los Perros de Caza, en línea recta desde Polaris pasando por Alioth (Osa Mayor) y es un cúmulo abierto de estrellas.

Representa imaginativamente los cabellos de la reina egipcia Berenice. Según la leyenda, sacrificó su cabellera a Afrodita en beneficio del regreso, ileso, de su esposo Ptolomeo III Evergetes. Pero una noche la cabellera desapareció del templo y fue el astrónomo Conón de Samos el que explico que había surgido una nueva constelación en el firmamento y que sin duda era la cabellera de Berenice, que la diosa Afrodita había puesto allí.
Otro relato procede de la mitología griega, donde es el Velo de Tisbe; según la leyenda, Píramo y Tisbe eran dos jóvenes enamorados cuyos padres se oponían a su amor. Un día planearon encontrarse a las afueras de la ciudad, debajo de una morera de moras blancas. Cuando Tisbe llegó, se encontró con una leona manchada de sangre, por lo que Tisbe huyó, y mientras escapaba, perdió el velo que fue llevado hasta la leona, y con el cual el animal jugó, manchándolo de sangre. Cuando Píramo llegó a la cita, descubrió el velo manchado de sangre y hecho jirones, y supuso que su amada Tisbe había sido devorada por la leona, por lo que desesperado, se dio muerte con la espada. En ese momento llegó Tisbe, y al ver el cuerpo inanimado de su amante, se abrazó a el y se suicidó con la misma espada; la sangre de los amantes dio a las moras blancas el color rojo que tienen, y desde entonces ese es el que ha sido. Zeus tomó el velo y lo puso entre las estrellas, ondeando bajo el león.




CORONA BOREAL (Corona Borealis).

Es un delicado círculo de estrellas, de reducidas proporciones. Se encuentra entre Boyero y Hércules y con Serpens al Sur. Alphecca es la estrella más brillante.



Para los antiguos griegos representaba la corona de Ariadna (“la más pura”) que en un principio fue una diosa de la fertilidad cretense y después apareció en la mitología como la hija del rey cretense Minos y Pasífae. Fue ella la que proporcionó un hilo a Teseo para guiarle en su salida del laberinto del monstruoso Minotauro. Lo amantes se casaron y el dios Dionisos les dio una diadema de oro, fabricada por Hefesto, como regalo de bodas.

El resto son una serie de constelaciones agrupadas como tales en el S. XVII para identificar estrellas débiles que quedaban sueltas en los grupos antiguos. Son: Camelopardis (la Jirafa), el Lince y el León Menor.


Aquí os dejo la fotografía del mapa celeste, en concreto de las constelaciones de las que he hablado. No la he reducido, así que si pinchais sobre ella la podréis ver en grande.

Bueno, pues la receta que propongo y de nuevo teniendo en cuenta las muy frías noches que por aquí tenemos (por favor, ¿a quién se le ocurrió decir que en España hace calor?. Aquí de calor nada de nada) para acompañar un vaso de leche, chocolate o así, es la siguiente (y no puede ser más sencilla):






BIZCOCHO DE NATA.

Ingredientes: 3 huevos, 1 sobre de levadura Royal, 200 gr. de nata, 200 gr. de harina (yo he utilizado de repostería), 150 gr. de azúcar y una pizca de sal.

En un recipiente se baten con las varillas eléctricas los huevos con el azúcar; poco a poco se va añadiendo la nata sin dejar de batir, la harina, el sobre de levadura y la pizca de sal.

Una vez que está bien mezclado, todo ello se vierte en un molde que ha sido antes engrasado con mantequilla y enharinado. Se mete en el horno ya precalentado a 180 ºC y se deja unos 25 minutos. Desmoldar en caliente.

Nota: Si existiera algún problema con el horno, lo que se tiene que hacer es ponerlo a menor temperatura durante más tiempo; de todas formas, para saber si ya está lo que se hace es pincharlo con una aguja y ver si sale seca. Si es así, ya está cocido.