ASESINAS FAMILIARES I
https://www.youtube.com/watch?v=i5Kwf_nNmGI
Música: “Requiem for a dream”, de Clint Mansell.
Hace bastantes años, una madrugada que no podía dormir, me puse a ver una película en la televisión que me resultó realmente inquietante, un argumento tan raro que no lo pude olvidar; entonces no sabía que eran hechos reales. Años después, por casualidad, supe que había sido tal cual. La película en cuestión se llama “Mi hija Hildegard” y es de Fernando Fernán Gómez. Con éste post se abre una serie dedicada a la crónica negra, tanto española como de otros países.
Música: “Requiem for a dream”, de Clint Mansell.
Hace bastantes años, una madrugada que no podía dormir, me puse a ver una película en la televisión que me resultó realmente inquietante, un argumento tan raro que no lo pude olvidar; entonces no sabía que eran hechos reales. Años después, por casualidad, supe que había sido tal cual. La película en cuestión se llama “Mi hija Hildegard” y es de Fernando Fernán Gómez. Con éste post se abre una serie dedicada a la crónica negra, tanto española como de otros países.
Madrugada del 9 de junio de 1933. Se escuchan 4 disparos que proceden de un ático en la calle Galileo; Aurora Rodríguez Carballeira acaba de matar a su hija Hildegart, a su creación. Como una moderna Frankestein, Aurora había concebido a Hildegart para que fuera una especie de “mesías” para el resto de las mujeres, que las salvaría del yugo al que se encontraban sometidas por los hombres y la educación represiva; pero cuando la hija se reveló, Aurora no vio otra opción que destruir lo que había creado, y a los pies del cadáver de su hija dejó una nota: “Suprimir una obra sublime con un acto sublime, ya que cualquier madre es capaz de parir, pero no de matar a sus hijos. La facultad de dar la vida lleva implícita la de quitarla, pero requiere gran valor”.
Aurora Rodríguez Carballeira había nacido en 1890 en El Ferrol, en el seno de una familia acomodada; la biblioteca de su padre la abrió las puertas al socialismo utópico y al romanticismo de Saint-Simon y Owen, aunque no las digirió bien, y enseguida veréis la razón de que diga esto. Proyectó crear a alguien que pusiera fin a las injusticias que se cometían sobre todo con las mujeres, así busco al hombre ideal que la ayudara en su empresa. Qué nadie se engañe, nada de amor ni siquiera de placer; odiaba a los hombres tanto como despreciaba al resto de las mujeres. Tras años de búsqueda encontró a aquél que le convenía, un capellán castrense al que le sedujo la idea de engendrar un ser superior; una vez que Aurora se quedó preñada -sí, esa es la palabra, no embarazada-, le echó y sola se marchó a Madrid.
Hildegart –cuyo significado es “jardín de la sabiduría”- nació el 9 de noviembre de 1914. Sometió a la niña, desde un principio, a un encarcelamiento psicológico; nada de afecto, de ternura pero a los 3 años ya sabía leer, a los 10 hablaba francés, inglés y alemán y a los 17 había terminado la carrera de Derecho y comenzaba la de Medicina. Todo un portento, con una desbordante capacidad intelectual que daba mítines y conferencias. Llegó a ser la secretaria de la Liga Española por la Reforma Sexual, fundada por Marañón y su fama llegó incluso a oídos de H.G. Wells con quién trabó amistad e incluso la invitaron a viajar a Inglaterra.
A los 18 años ya había escrito una abundante bibliografía: “El control de la natalidad”, “La rebeldía sexual de la juventud”, “Revolución y sexo”, “¿Cómo se curan y evitan las enfermedades venéreas?”,“¿Se equivocó Marx?”. Estudiaba sin parar, sobre todo, filosofía y sexología. Devoraba a Marx.
A los 18 años ya había escrito una abundante bibliografía: “El control de la natalidad”, “La rebeldía sexual de la juventud”, “Revolución y sexo”, “¿Cómo se curan y evitan las enfermedades venéreas?”,“¿Se equivocó Marx?”. Estudiaba sin parar, sobre todo, filosofía y sexología. Devoraba a Marx.
Pero al no estar aquejada de los trastornos de su madre, comienza a interesarse por el otro sexo y se enamora de un compañero del Partido Federal, Abel Velilla. Aurora, la madre, comienza a sentir pánico e incluso cae en paranoia como creer que existe un complot internacional para arrebatarla a su hija, así que amenaza a su hija con el suicidio a lo cuál la hija no hace ningún caso. Ya está servida la tragedia; la secuestró en la propia casa, la cortó el teléfono, y prohibió la correspondencia y la negó cualquier contacto con el mundo exterior. Pocos días después la matará.
Aurora fue condenada a 26 años, 8 meses y un día de prisión, pero la recluyeron en el hospital psiquiátrico de Ciempozuelos, en dónde murió. Nunca se arrepintió y lo que decía es que lo volvería a hacer.
Muy interesante es el siguiente link, os lo recomiendo:
http://jldiasahun.googlepages.com/losreformadoresdelirantes.casocl%C3%ADnicodea
Aurora fue condenada a 26 años, 8 meses y un día de prisión, pero la recluyeron en el hospital psiquiátrico de Ciempozuelos, en dónde murió. Nunca se arrepintió y lo que decía es que lo volvería a hacer.
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Bueno, pues como pertenece a la crónica negra del país y tomando como referencia las ideas de Aurora, os voy a dar una receta que es realmente buena:
PAELLA DEL PUEBLO. (Foto casera. Pinchar para ampliar).
Ingredientes (para 4 personas): 200 gr. judías verdes, 350 gr. arroz, 600 gr. pollo, 2 huevos cocidos, 400 gr. congrio, 250 gr. calamares, 200 gr. guisantes, 100 gr. gambas, 100 gr. pimientos rojos asados, 400 gr. mejillones, ¾ l. de agua, ½ vaso aceite girasol, sal, ½ cebolla muy picada, 2 dientes de ajo, perejil, azafrán.
En una cazuela ponemos el aceite y calentamos, añadimos la cebolla y los ajos muy, muy picados y el perejil también picado. Sofreímos un poco y añadimos el pollo sazonado y cortado, los calamares y el congrio limpios y cortados, junto con los guisantes, las gambas, los mejillones y las judías verdes. Lo dejamos rehogar unos diez minutos. Añadimos el arroz, el agua (que esté caliente) y el azafrán y lo dejamos cocer hasta que esté. Adornamos con el pimiento en tiras y el huevo cocido.
P.D.- Es importante tener en cuenta que No es una paella, es un arroz guisado. Los guisantes se pueden sustituir por aceitunas verdes (aunque en menos cantidad, por ejemplo una docena de aceitunas), que le da muy buen sabor.
Ingredientes (para 4 personas): 200 gr. judías verdes, 350 gr. arroz, 600 gr. pollo, 2 huevos cocidos, 400 gr. congrio, 250 gr. calamares, 200 gr. guisantes, 100 gr. gambas, 100 gr. pimientos rojos asados, 400 gr. mejillones, ¾ l. de agua, ½ vaso aceite girasol, sal, ½ cebolla muy picada, 2 dientes de ajo, perejil, azafrán.
En una cazuela ponemos el aceite y calentamos, añadimos la cebolla y los ajos muy, muy picados y el perejil también picado. Sofreímos un poco y añadimos el pollo sazonado y cortado, los calamares y el congrio limpios y cortados, junto con los guisantes, las gambas, los mejillones y las judías verdes. Lo dejamos rehogar unos diez minutos. Añadimos el arroz, el agua (que esté caliente) y el azafrán y lo dejamos cocer hasta que esté. Adornamos con el pimiento en tiras y el huevo cocido.
P.D.- Es importante tener en cuenta que No es una paella, es un arroz guisado. Los guisantes se pueden sustituir por aceitunas verdes (aunque en menos cantidad, por ejemplo una docena de aceitunas), que le da muy buen sabor.